El gobierno de Javier Milei ha dado un giro inesperado en su política exterior con China. Karina Milei, secretaria general y figura clave del entorno presidencial, tiene previsto viajar a Shanghái para participar en la Exposición Internacional de Importaciones, que se llevará a cabo a partir del 5 de noviembre. Este viaje marca un cambio significativo en la postura diplomática de Argentina hacia China, un país al que Milei había criticado fuertemente durante su campaña electoral.
En su visita, Karina Milei no solo representará a la Fundación Argentina para la Promoción de Inversiones, sino que también buscará avanzar en la relación comercial bilateral con China, ofreciendo el sistema RIGI a empresas mineras y preparando una posible reunión entre Javier Milei y el presidente chino Xi Jinping en el marco del G20 en Brasil, que se celebrará en noviembre.

Este acercamiento sorprende, dado que durante la campaña presidencial de 2023, Javier Milei había declarado su rechazo hacia China por su régimen comunista. Sin embargo, tras asumir la presidencia, el mandatario moderó su discurso y reconoció la importancia de mantener relaciones comerciales estratégicas con la potencia asiática. En especial, la renovación del swap de 5.000 millones de dólares, vital para sostener las reservas del Banco Central argentino, ha sido un factor clave en este cambio de rumbo.
El giro diplomático hacia China plantea desafíos, ya que Milei también deberá equilibrar las relaciones con Estados Unidos, que mantiene una postura crítica hacia Beijing, en especial por su relación con Rusia. Sin embargo, el viaje de Karina Milei podría ser el primer paso para afianzar lazos comerciales y financieros con el gigante asiático, que ve en Argentina un socio clave para el suministro de materias primas como el litio y el cobre.





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