Washington, 27 de junio de 2024. La cumbre de la OTAN inicia hoy en Washington con una agenda centrada en la protección de Ucrania frente a la agresión rusa y en la contención de la ofensiva geopolítica de China. Los 32 países miembros de la alianza, encabezados por Estados Unidos, debatirán una hoja de ruta para enfrentar el plan de ocupación de Vladimir Putin y limitar la influencia estratégica de Xi Jinping.

La agenda de la cumbre se vio sacudida por un trágico evento: un misil crucero Kh-101 lanzado por Rusia impactó en el hospital pediátrico Okhmatdyt en Kiev, causando un número aún indeterminado de muertos y heridos. Este ataque, calificado como crimen de guerra, aceleró las discusiones sobre la necesidad de fortalecer la capacidad bélica de Ucrania y mejorar sus sistemas de defensa aérea.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, presentó un informe detallando los hechos previos al ataque, mientras que la CIA y el Pentágono realizan sus propias investigaciones. La sólida sospecha de Zelensky es que el ataque fue deliberado, ejecutado en territorio ruso, donde Ucrania tiene prohibido usar armamento proporcionado por Estados Unidos y Europa.

Durante la cumbre, Zelensky insistirá en utilizar armamento occidental en territorio ruso, una propuesta que enfrenta resistencia de Washington y Bruselas para evitar una escalada del conflicto. Además, Estados Unidos no levantará el veto a la entrada de Ucrania en la OTAN en 2024, buscando prevenir una expansión global del conflicto en el Cáucaso.

En respuesta a la reciente tragedia, el asistente especial de Biden, Michael Carpenter, declaró que Estados Unidos y sus aliados están comprometidos a proporcionar sistemas de defensa aérea adicionales a Ucrania. Actualmente, el Pentágono dispone de 62 sistemas Patriot, aunque no todos son de disponibilidad inmediata.

La cumbre también abordará la cooperación internacional para contener la influencia de China. Se espera la participación de Australia, Japón, Corea del Sur y Nueva Zelanda, reflejando la creciente percepción de que los desafíos en Asia y Europa están interconectados.

La OTAN, creada en 1949 para enfrentar a la Unión Soviética durante la Guerra Fría, se enfrenta ahora a un panorama geopolítico complejo y multipolar. La cumbre en Washington buscará diseñar una estrategia a largo plazo para proteger a Ucrania y contener las ambiciones autoritarias de Beijing y Moscú.