El tenista argentino Francisco Cerúndolo brindó una de las actuaciones más destacadas de su carrera, al poner contra las cuerdas al legendario Novak Djokovic en los octavos de final de Roland Garros. Sin embargo, el número uno del mundo se impuso finalmente por 1-6, 7-5, 6-3, 5-7 y 3-6, despidiendo a Cerúndolo del segundo Grand Slam de la temporada.

El encuentro, disputado en la cancha Philippe Chatrier, comenzó con un primer set arrollador para Djokovic, quien ganó 6-1 en 40 minutos. Cerúndolo, ubicado en el puesto 23 del ranking mundial, no se dejó amedrentar y reaccionó en el segundo set, donde aprovechó una molestia en la rodilla de Djokovic para llevarse el parcial por 7-5.

El tercer set fue un despliegue de buen tenis por parte del argentino, quien se adelantó rápidamente 3-0 y mantuvo la ventaja hasta cerrarlo 6-3. Con el marcador global a su favor, Cerúndolo tuvo la oportunidad de cerrar el partido en el cuarto set, pero algunos errores no forzados y la recuperación de Djokovic hicieron que el serbio se lo llevara por 7-5.

En el quinto y definitivo set, la jerarquía de Djokovic se impuso. El serbio, recuperado de sus problemas físicos, ganó el parcial por 6-3, sellando una victoria que le permitió avanzar a los cuartos de final después de cuatro horas y media de un partido épico.

Cerúndolo, de 25 años, demostró un gran nivel y puso en serios aprietos a uno de los mejores tenistas de la historia. A pesar de la derrota, su actuación fue destacada por su valentía y calidad técnica, dejando una huella en Roland Garros.

Djokovic, por su parte, continúa su camino en busca de un nuevo título en París. Tras un inicio de temporada complicado, el serbio mostró su capacidad de resiliencia y fortaleza mental, consolidándose como el principal candidato al título.