Un impresionante eclipse solar total dejó maravillados a millones de personas en México, Estados Unidos y Canadá, convirtiéndose en el evento astronómico destacado del año. Este fenómeno celestial, que oscureció brevemente el día, pudo ser observado en forma parcial por miles a lo largo y ancho de América del Norte.

El eclipse solar total, considerado uno de los espectáculos naturales más impactantes, se desarrolló durante varias horas a partir de las 17.07 GMT (14.07 hora argentina). En este evento, la Luna se interpuso entre la Tierra y el Sol, bloqueando por unos breves minutos la luz solar directa y sumiendo en la oscuridad aquellos lugares ubicados en el camino de la totalidad.

El recorrido del eclipse, que tuvo una anchura de 185 kilómetros, abarcó 3 estados de México, 15 estados de Estados Unidos y 4 estados del sureste de Canadá. Desde Mazatlán, México, hasta la península de Terranova y Labrador, Canadá, el eclipse dejó una estela de asombro a su paso.

Durante los breves minutos de totalidad, ciudades como Torreón experimentaron una oscuridad completa, con un eclipse de 4 minutos y 28 segundos, siendo uno de los momentos más destacados del fenómeno. Posteriormente, el eclipse continuó su trayectoria atravesando importantes urbes estadounidenses como Dallas, Indianapolis y Buffalo, para luego dirigirse hacia Canadá.

Los eclipses solares totales, además de su impacto visual, han tenido un papel significativo en la historia y la ciencia, inspirando mitos, rituales y descubrimientos científicos. A pesar de la imposibilidad de capturar completamente la experiencia en palabras o imágenes, estos fenómenos continúan desafiando nuestra comprensión del universo y recordándonos la grandeza y misteriosa belleza del cosmos.

El eclipse solar total no solo ofrece un espectáculo visual impresionante, sino que también brinda una oportunidad invaluable para realizar experimentos y observaciones astronómicas que ayudan a expandir nuestro entendimiento del sistema solar y más allá.