En una nueva y emocionante gala de eliminación del reality más seguido de la televisión, conducida por Santiago del Moro, Lucía fue la duodécima participante en dejar la competencia de «Gran Hermano», obteniendo el 47.7% de los votos. Sin embargo, se le brinda la oportunidad de reingresar mediante un repechaje. La gala estuvo marcada por la emoción y la sorpresa, con Furia y Lisandro recibiendo el 32.8% y el 19.5% de los votos, respectivamente.

El público jugó un papel crucial, eligiendo a Nicolás como el primero en ser salvado con un mínimo del 0.2% de los votos, seguido por Martín, quien expresó su asombro al ser salvado tan pronto con solo el 0.59% de los votos negativos. Rosina, la tercera menos votada, mostró su gratitud al obtener el 0.99% de los votos, junto a Zoe, quien fue la siguiente en ser salvada con el 1.3% de los votos.

La noche avanzó con Emmanuel convirtiéndose en el quinto salvado, con el 2.1% de la preferencia del público. Antes del anuncio del eliminado, los nominados tuvieron un minuto para convencer al público de su permanencia en la casa, destacándose Lisandro por su sinceridad y Lucía por su emotivo llamado a no ser votada fuera.

Furia, por su parte, destacó su singularidad y disposición a seguir adelante, mientras que enfrentamientos internos y estrategias de nominación añadieron tensión a la gala. Federico, el último salvado antes del anuncio final, pidió confianza al público, asegurando que aún no era su momento de salir.

La noche culminó con la anticipación de Del Moro, revelando que Federico seguía en la competencia después de una votación que superó el millón de participaciones, dejando a Manzana con el 6.8% de los votos. La competencia sigue intensa, con promesas de más sorpresas y emociones en la casa más famosa del país.