En un intento por mejorar la seguridad y el orden en las cárceles de Santa Fe, se implementará un nuevo protocolo que obligará a los reclusos a utilizar uniformes. La medida busca estandarizar la vestimenta de los internos y facilitar la identificación visual, contribuyendo así a un mayor control dentro de las instalaciones penitenciarias.

Este cambio en la política penitenciaria ha generado diversas opiniones. Por un lado, las autoridades argumentan que la medida fortalecerá la seguridad al simplificar la identificación de los reclusos y evitar posibles confusiones. Por otro lado, algunos críticos señalan preocupaciones sobre la posible estigmatización de los presos y plantean interrogantes sobre la efectividad real de esta medida en la reducción de incidentes dentro de las cárceles.

La implementación de uniformes para los presos se llevará a cabo de manera progresiva en las cárceles de Santa Fe, y se espera que genere un impacto en la dinámica interna de las instituciones penitenciarias en los próximos meses.